LAS ROSAS

Ahí están, ¡ahí están, las festivas!
¡Las que ondulan al aire, primorosas,

sobre el cáliz, cubierto de espinas
¡El afable tapiz de sus hojas!

 

Ahí están, ¡ahí están las festivas!
Que perfuman la mágica aurora,
Que reavivan el gozo inestable
De amores que caen en la sombra.

 
Unas son como copos de nieve,
caricias candentes, las otras,
Como cantos magníficos muchas
¡Y cuales risas angélicas todas!

Son relumbres de oro y rubíes, 
son manojos de piedras preciosas
son fulgores vivaces que agitan
el olor de sus tenues corolas.

 

De noche no más se columpian,

Y, al nacer en oriente la aurora

Despiertan las florecillas inquietas

Por temor a que alguien las rompa.

 

¡Adiós deleitables visiones de un día,

Adiós, esperanzas que el viento deshoja,

Adiós,ilusiones candentes del alma,

Oh, rosas de luz sois vosotras!