Contrariada a lo que sucede
esta estructura se hunde
más y más todavía,
sin llegar a concebir
idea de expresividad.
Me pongo en mi lugar
explorando un espacio vacío
y sin salida al exterior.
Este cuerpo sin nada que ofrecer
sino búsqueda de lo que cree ser
y, ocupándose de verdades prohibidas
y sin el menor atisbo de guía
de cómo son o deben ser las cosas.
Quizás resulte pesado…
pero tiene vida
y es el comienzo…